12/2/12

Leer para escribir: Primeros capítulos

Un aire salvaje me acaricia el pelo, vestida de azul soñador, botas de agua y pelo negro azabache tan rizado como las chorros del oro. Mi amigo, vestido de negro, sus ojos tan abiertos como dos platos. De camino a casa, dos niños corren destartalados, perdidos, asustados: -¡El rarito!, ¡El rarito!, ¡El rarito, que viene! Mi amigo y yo nos alegramos; el ruido se hace cada vez más silencioso. Nosotros sin rumbo, solo escuchábamos, cómo el viento peinaba a los árboles, cómo el viento le soplaba a la hierba. Fuimos hacia el pasaje de las fuentes. Se respiraba un aroma dulce, melodioso y casero. Cerca de allí había una panadería. Maxi la miraba como si fuera una madre. Olfateaba el parque de arriba a abajo. Nos tumbamos bajo un almendro en flor; sus flores jóvenes renacían. Él, las miraba como algo nuevo, impresionante, inaudito. Su mirada era libre, revoloteaba como una divertida mariposa de color. Los rosales eran de todos los colores, pero el las veía de otro color... Nunca supe que un animal fuera, tan impresionante.
Enma 

Su linda cabeza diminuta como un grano de azúcar y su plumaje sedoso como la tela me hacía tan feliz; casi tanto como ver una estrella fugaz. Pero la tranquilidad se rompió al ver como detrás del tonto del barrio aparecía una muchedumbre de niños gritando:-"Dadnos er balón". Me di cuenta de que mi preciada paloma le recorría el miedo por las venas y me desvié de trayecto bajando la calle Mestanza. Pero el griterio seguía ya que una pandilla de adolescentes vareaba diciendo:-"Dale ar centro que saen ma avispas". Nos alejamos de esa marea negra como un rayo de luz asustado y cogimos un atajo perenne y oscuro. La melancolía nos recorría el cuerpo. Al llegar me di cuenta de que tenía salmonela y llame al veterinario."Panecillo" parecía triste y sudaba por los ojos,le dije que no se preocupara y que nunca lo dejaría. Que por el y su ensordecedora belleza me iría con el hasta el fin del mundo. Él se calmó y respondió con un pio-pio bajo de voz, pero tan claro como el mismo.
Raúl Cañizares 

En las lumbres era todo ideal. Gracias al fuego colosal, guardábamos el agradable calorcillo, junto a los familiares o amigos. Daba gusto comer una chuleta o algún filete junto al fuego, en la calle, de noche, sin coches ni ruidos. Los niños más pequeñitos, saltaban encima de las ramas secas, que en un fururo muy cercano serían quemadas por el protagonista de la noche: La lumbre. Las chispitas del ardiente fuego se consumían y volaban por el cielo junto a las otras pequeñas cenizas. Aquellas lumbres eran gigantescas y las personas se quedaban embobadas a causa de sus hermosas formas, que podrían contarte historias y leyendas todas esas noches. Todos se ablandaban al probar bocados, que, aún no ser un manjar, se volvían exquisitos, al estar rodeados de cosas confortables y consideradas.
 Julia 

Un insonoro grito de tristeza y dolor resonó entre las calles casi enanas que se escondían del sol entre las altas cumbres y hondas montañas. • No te preocupes Estrella, el dolor no es nada, sólo un cruel sentimiento, además, tú eres inmune a todo lo malo que haya en la Tierra, tú solo eres parte buena. Yo tiraba con fuerza delicadamente, más aún veía a Estrella con sus ojos negros brillantes y su piel toda tapizada de piel marrón claro. Sabía que el dolor le inundaba su delicado cuerpo. No podía sacársela. Tiraba y tiraba y el cielo se apagaba, el sol se iba a la cama y el búho blanco salía a decorar el cielo junto a las estrellas. Ya cuando iba a sacársela, tirando con fuerza ella confiaba en mí y yo en ella. Al final el pincho se escapó quedando Estrella libra de lágrimas.

Mercadillo Medieval:
 
  • "Comprren hadas de la suerrte, campanillas, adorrnos parra su casa".- resonaban las monótonas voces apenas afónicas por el frío de la noche.

Yo observaba los centenares de puestos pero uno me resaltó entre todos a Estrella, la de la creepería. Salía un dulce aroma a natilla derretida, chocolate fundido y sirope de fresa. Entre el sueño de delicia una voz me devolvió a la realidad.

  • Oferta señores y señoras, ahora 1 creepe a tan solo 1€ y 5 creepes a 3€.

La oferta era tan buena que los tres euros colaron en 10min y me imaginé que estaba flotando en una nube mientras caminaba dormido entre el tumulto de clientes. Iba ya a irme cuando dos puestos me hicieron fantasear de nuevo: un puesto de águilas rapaces y otro de armas inofensivas de madera tallada a mano por un hombre con una barba de mendigo. Yo soñé volar en lo alto de un águila rapaz en medio de una batalla medieval y disparaba a los guerreros con una ballesta y un arco. Y luego me lanzaba a luchar cuerpo a cuerpo con “Mi Lor” y mi escudo. Pero eso son sólo sueños efímeros.

San Valentín
 
  • Mira Estrella, tu ángel caído del cielo que ha venido a sanar la profunda herida que te hizo el caprichoso caniche y el ángel de Cupido con su enamorador arco y flechas de eterno amor.

Ahí iba él caminando humildemente con sus patitas delgadas y manchadas de barro. Se iba él por el duro asfalto de la calle Vieja llevándose a mi mascota hacia el dulce sentimiento.

Ella se encantaba a cada paso que daba y mi encantada y hechizada mascota se me escapaba bajo el cielo de malvas y rosas sonrojadas. Con sus ojos nuevos y su piel bañada en champú del alba, él le regalaba su mirada.

Al caer la noche los dos se juntaron frente al monte, bajo la mirada de las estrellas y la luna,los dos, se acariciaron sus cabezas entre sí.
Gabriel

 
Desde el mirador.-
Desde el mirador de la Sierra se veía un cielo clareado. Las nubes parecían ovejas; el sol era abrasador. Apareció una mancha que se agrandaba tapando el sol. Era una bandada de pájaros emigrando formando una flecha. La Montaña parecía un grano de tierra. Los piños parecían que bailaban en la disc, que el aire movía las hojas, los animales hacían una maratón Las personas observaban el paisaje como dentro de una película. Desde arriba se veía todo diminuto .
Pedro Ángel

San Valentín.-
Hoy es día 14 de Febrero y es San Valentín. Es un día muy especial porque hoy es un día del amor, donde los hombres y las mujeres se enamoran gracias a un personaje del amor que le llamamos cupido con sus flechas del amor. Con su mochila de forma de corazón y dentro sus flechas del amor que siempre funcionan. Es un día donde los hombres le regalan a sus novias regalos muy convincentes como bombones, tartas de chocolate e incluso colgantes, todo lo que desearía una mujer. También hay mujeres que regalan: relojes, pulseras y hasta un bañador para que se lo pongan en la playa y sean como peces en el agua los dos juntitos y con cupido a su lado con sus flechas del amor.
Rosa

 La candelaria
Ayer, enfrente de mi casa trajeron miles de ramas de olivo, una plancha de hierro para que no se queme el suelo y muchas sillas alrededor. Yo me subí encima de las ramas de olivo con todos mis amigos. Cada vez quedaban menos en el montón y la llama se hacía mas grande cada vez. Lo mejor era que toda la gente que estaba allí llevaba una comida como, patatas al alioli, ensaladilla rusa, ensalada de pasta …..
Por eso cada año no me pierdo ninguna candelaria porque me lo paso muy bien.
Tomás

 La gente gritando para que los compradores se enteren del precio. Venden cosas antiguas, como cucharas de madera, y cosas para supersticiones, como algo para remediar el mal de ojo.
También hay muchos puestos de pulseras, con tu nombre, adornos con tu nombre, y más...
Para los niños pequeños hay un tiovivo que funcionaba, montándose un hombre en la bicicleta,también había un barco, donde los niños tiraban sombreros pirata.
Hay puestos de brujitas de la suerte ponen el significado de los colores, y tu compras la bruja que más te guste. Hay, para colgantes, para pulseras, para pendientes e incluso brujas para ponerlas en tu llavero.
YO vi un puesto, donde vendían queso, de estos antiguos, con ese humo, que te molesta. Había puestos de chuletones, jamones...
Olía mucho a incienso, irían echando, por toda la calle. Normalmente, el mercadillo mediaval se pone en las palmeras, y por ahí, pasa mucha gente, y compra cosas. Sobre todo en los puestos de joyas.
Virginia 

 
Expresión Escrita: “El atardecer”.
En los atardeceres, me voy a la terraza, a contemplar la majestuosidad del sol apagándose. De pronto, cuando el sol se va, los pájaros van a sus nidos y su hermosos piar se apaga. El sol, se convierte en una gran yema de huevo, que se esconde por la noche porque le da miedo la oscuridad. Dicen que el atardecer, son para los enamorados, pero yo disfruto viéndola sola, acompañada únicamente por mi perro Lucky. Todos los atardeceres, en los bancos de la plaza, unas parejas de enamorados, contemplan el tímido sol que se esconde.
María 

 
Expresión Escrita: San valentín
Hoy para mí, es uno de los días mas cursis del año. El aire se impregna de amor, la gente, dicen falsas y maravillosas promesas de amor. Un buen día para los supermercados y tiendas, para que compren peluches, bombones, ramos de flores ….. Todo esto es una simple excusa para comprar.
Cupido con sus flechas de amor, mejor que solo te roce porque si te la lanza con una ballesta ….
Estas apañado chato! Te obliga a hacerle caso, la comida, limpiar la casa, hacerle el café ….. y lo más vergonzoso. ( al menos para mí), ver a las personas darse besos en mitad de la calle.
Ana 

 La batería del coche.
Un día me levanté para ir al colegio, pero como soy muy lenta para vestirme y peinarme me dieron las nueve menos cinco. Mi madre, corriendo, fue a llamar a mi tita para que nos llevara a mi hermano y a mí. Pero del frío que hacia, el coche no arrancaba y entonces nos pusimos de los nervios. Pero de repente pasó un coche y ese fue el afortunado que nos iba a arrancar el coche, El hombre se paró, nos puso las pinzas y arrancó. Nosotros muy contentos se lo agradecimos y el hombre se fue. Ya cogieron y me llevaron al colegio, pero me daba miedo entrar solo de pensar en la regalñina del profe. En efecto, fue entrar por la puerta y me pegó un grito que me puso los pelos de punta. Ya le explique lo que pasó y me puse a leer.
Bárbara

 Insensatos los cazadores que cazan donde ellos quieran.
Yo vivo en un campo al lado de Bailén y también al lado de un pinar. En el pinar que os hablo no se puede cazar, pero cada fin de semana los cazadores se ponen a cazar o que sea. Tengo una pista de pádel pegada al bosque. Un día estaba jugando al pádel con mi padre cuándo oímos un estruendo en la pared, era un tiro que había impactado contra la pared. Salimos al bosque para decirles que se fueran pero ya no estaban.
A mi me da igual que cacen pero en un coto de caza.
Diego

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